Aceptación de la Cosmovisión Indígena:
Mis amigos me mandan cosas… es genial levantarme a la mañana, café, mate, o cualquier infusión que recubra mi cuerpo y encontrarme con mails con links directos a información que ellos consideran relevantes para la página, para todos, para que sepamos.
De esta forma –además de facilitarme el tiempo que me lleva buscar novedades y conectores globales– se genera sinergia, feedback, comunicación, o como sea que quieran denominar a este proceso que hacemos nosotros al tomar contacto y charlar… al hacer correr la voz.
Uno de los artículos que me enviaron, muestra un cuadro con los resultados estadísticos de una encuesta Gallup, donde podemos ver que –para la opinión pública estadounidense encuestada– el crecimiento económico tiene prioridad sobre las cuestiones medioambientales… Triste, pero entendible en nuestra especie; me salvo yo primero, y después veo si me alcanza para enmendar el bardo que hice para lograrlo.
Ahora bien, la crisis ecológica que detonamos con nuestros modos extractivos y modelos económicos de producción, puso fin a una visión en donde mayor desarrollo rural implicaba hacer desaparecer el campesinado, los indígenas, y toda persona que no tenga un documento que diga que esas tierras le pertenecen. En otras palabras, que los indígenas improductivos se corran de estás tierras y le dejen lugar a la vaca de exportación y al tractor deshumanizante…
Sin embargo, para superar esta crisis, debemos retomar la percepción religiosa de la naturaleza que poseen de manera instintiva las culturas indígenas alrededor del mundo.
Ellas “son poseedoras de cosmovisones y modelos cognoscitivos, estrategias tecnológicas y formas de organización social y productiva, más cercanas a lo que se a visualizado como un manejo ecológicamente adecuado de la naturaleza” – Victor M. Toledo – Utopía y Naturaleza. El Nuevo Movimiento Ecológico de los Campesinos e Indígenas de América Latina. Ed. Nueva Sociedad, 1992. Pág. 73
No olvidemos nunca que existía un manejo sustentable de los recursos naturales antes de los procesos de colonialismo que se dieron en nuestro continente. (Temas abordados en los boletines conscientes 46 y 54). Y no un “manejo” en el sentido técnico de la palabra (administrar bien), sino un concepto mucho más elevado de manejo. Una simbiosis natural engendrada y nutrida por la cultura.
Toledo afirma que existen hoy en día 5 fenómenos que le dan mayor envión a la aceptación del paradigma Indígena en Latinoamérica. Léanlos con atención, porque son fenómenos REALES, pero que no tienen el rating suficiente como para estar en la programación de las 10 de la noche de la tele:
1) el cada vez más evidente fracaso de los sistemas productivos modernos. Basta con ver como se van cayendo una a una las economías, salvaguardados por el F.M.I. a último momento para que todo siga funcionando unos años más.
2) la proliferación de consignas tecnoproductivas de inspiración ecológica impulsadas por una nueva generación de investigadores y científicos (NOSOTROS)
3) el surgimiento y expansión de innumerables ONGs… La importancia de este punto está ampliamente tratada en el Capítulo 8, “La economía tiene miedo de no ser ignorante” de Concientización Ploff: Pensamientos y Fragmentos De La Vida Cotidiana Reflexiones Para Una Concientización Social, que pueden descargar y leer acá)
4) la aparición de nuevas formas de economía ecológica (varias veces les conté que ecoportal.net brinda un sólido curso a distancia sobre esto).
5) la aparición y el desarrollo de la consciencia y los movimientos ambientalistas (acá estamos, leyendo).
Toledo nos recuerda que América Latina es “la porción más húmeda del planeta, la que aloja las mayores masas forestales, y la que encierra la mayor diversidad biológica del globo”. Razón suficiente para defender nuestro lugar en el mundo.
“2 de Junio. Los indios son personas.
En 1537 el papa Paulo III dictó la bula Sublimis Deus.
La bula salió al choque contra quienes, deseando saciar su codicia, se atreven a afirmar que los indios deben ser dirigidos a nuestra obediencia, como si fueran animales, con el pretexto de que ignoran la fe católica.
Y en defensa de los aborígenes del Nuevo Mundo, estableció que son verdaderos hombres, y como verdaderos hombres que son pueden usar, poseer y gozar libre y lícitamente de su libertad y del dominio de sus propiedades y no deben ser reducidos a servidumbre.
En América, nadie se enteró.”
Eduardo Galeano. Los hijos de los días. Siglo Veintiuno Editores, 2012. Buenos Aires.
Un gran saludo,
Brian Longstaff.-
Florentina Toral sep 05 , 2012 at 07:58 07Wed, 05 Sep 2012 07:58:32 +000032. /
de los 5 fenomenos, el 5° es mi favorito! 🙂
Brian Longstaff sep 05 , 2012 at 08:12 08Wed, 05 Sep 2012 08:12:12 +000012. /
acá estamos, leyendo. =)