Buenas a todos!

Mi amiga, Lucila, me pasó unas líneas que quería compartir…

“Nuestro miedo mas profundo no es que seamos inadecuados. Nuestro miedo más profundo es que somos poderosos sin límite. Es nuestra luz, no la oscuridad la que más nos asusta. Nos preguntamos: ¿Quien soy yo para ser brillante, precioso, talentoso y fabuloso? En realidad ¿Quien eres tu para no serlo? Eres hijo de Dios. El hecho de jugar a ser pequeño no sirve al mundo. No hay nada iluminador en encogerte para que otras personas cerca de ti no se sientan inseguras. Nacemos para hacer manifiesto la gloria de Dios que esta dentro de nosotros. No solo algunos de nosotros: Esta dentro de todos y cada uno. Y mientras dejamos lucir nuestra propia luz, inconscientemente damos permiso a otras personas para hacer lo mismo. Y al liberarnos de nuestro miedo, nuestra presencia automáticamente libera a los demás.” Marianne Williamson, A Return to Love: Reflections on the Principles of «A Course in Miracles», Harper Collins, 1992. From Chapter 7, Section 3

El mensaje es activarse, hacer algo, tomar acción. Yo por este medio muestro la punta del iceberg, pero cada uno de nosotros tiene su propia montaña que escalar, y su propia esfera de realidad para mejorar. Participar de ciberacciones e informarse es un buen punto donde arrancar. En esta nota, se cuenta la noticia poco difundida de que hace 4 días atrás, unos activistas de Greenpeace bloquearon un buque de perforación de petróleo contratado por Shell, que partía desde Auckland, Nueva Zelanda, con destino al Ártico; y a través de ésta ciberacción, podés exigirle a Shell que no destruya el Ártico.

Y si quieren informarse pasen por losverdes.org.ar, es un foro de ecología política, un movimiento que está surgiendo en Argentina, y nuestra generación no puede pasar por alto. Es un movimiento político y social en construcción, pero uno que incluye a Gaia en su agenda…

Volviendo a la frase inicial, quiero aclarar que “Dios” ya no es la figura arquetípica de un tipo que observa y juzga desde afuera. El universo mismo es Dios, y lo que manifestamos con nuestro potencial es el universo y toda la realidad que nos rodea. En una biografía del naturalista escocés John Muir (1838-1914), hay una clara descripción del concepto de Dios desde un punto de vista natural:

“Dios para Muir era un término deliberadamente suelto e impreciso referido a una fuerza activa y creadora rodeando lo natural. Continuamente animado por esa fuerza divina, cada parte del mundo natural estaba en un flujo constante – la tierra moviéndose debajo de nuestros pies, glaciares fluyendo hacia abajo por la ladera de una montaña, plantas y animales evolucionando y extendiéndose. El flujo siempre tenía un propósito. Siempre se movió hacia la belleza. Siempre y en donde fuera era sacro.

La naturaleza para Muir (…) era el nombre que se le daba a la parte del mundo que los humanos no habíamos creado, que no podíamos manejar, y que puede y va a sobrevivir nuestra extinción. La naturaleza era raramente imaginada como un mundo libre completamente de la presencia o influencia humana – incluso la frase “naturaleza prístina” era más relativa que absoluta. La naturaleza, Muir creía, incluía a los humanos tal como cualquier comunidad incluye a sus habitantes. Pero el hacía esta crítica distinción: mientras que nosotros no podemos vivir sin las fuerzas y criaturas del mundo no-humano, ellos pueden vivir sin nosotros. Hay más de este mundo que el ser humano y sus artefactos.” Donald Worster, A Passion For Nature. The Life Of John Muir. Oxford University Press, 2008. Pág. 8 y 9

Como queriendo cerrar esas palabras con imágenes, Lucila también me pasó el siguiente video. Se llama Ashes and Snow (Cenizas y Nieve), y es la exposición de arte y fotografía de Gregory Coldbert, la cual fue vista por más de 10 millones de personas, convirtiéndola en la exposición de arte más vista en la historia del arte.

Gracias Lu por el aporte en este boletín. Un saludo fuerte,

Brian Longstaff.-

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