Estamos Evolucionando en Masa el concepto de liderazgo
Una sensación plena – un subidón literal de energía – es lo que se siente alrededor nuestro cuando nos juntamos entre varios que quieren cambiar las cosas… Charlas; miradas; entendimientos diversos… nos motivan a seguir con la frente en alto por un camino que escogemos como correcto, al alinearse con lo que sentimos dentro nuestro. Otra vez, sentir, y hacer. En ese orden…
Se cumplieron dos años de Masa Crítica Pampeana (y 22 años del movimiento a nivel mundial) y fue tiempo de conclusiones acerca del concepto de “liderazgo” para un movimiento de este tipo y de palabras capaces de forjarnos como personas…
Personas que se autoproclaman y reconocen como pertenecientes a una nueva generación de seres humanos que vinieron a cambiar las cosas sin ir al choque, sino construyendo con el ejemplo. Limados Mesurados del aquí y ahora.
Dos amigos presentaban sus opiniones, y los dos tenían razón, uno desde la práctica y otro desde la teoría. El primero, recalcaba la necesidad de que exista un personaje o interlocutor parcialmente rayado y caradura, o sencillamente carismático, que pudiese dirigirse a todos, ser escuchado a los fines de mantener la cohesión de la masa en movimiento. Y es cierto, siempre hay un líder dando vueltas ahí, detrás del telón, motivando y direccionando el accionar social del movimiento. Pero, ¿acaso ese líder no encarna los ideales defendidos por el movimiento social? En otras palabras: ¿a quién seguimos? Y, por otro lado, ¿es solamente uno, o pueden ser varios siempre y cuando prevalezca la horizontalidad?
En mi humilde opinión, los líderes encarnan ideales o una idea, o hasta incluso pueden llegar a perseguir una utopía que entrelaza toda una maraña de creencias para cambiar el mundo… y las personas, por lo general, se sienten más fácilmente identificadas con esos ideales y valores a través de una persona. Porque es más fácil compararse con el otro, criticarlo o imitarlo, que hacerlo con algo abstracto como un ideal…
Así, fuimos teniendo a una Madre Teresa de Calcuta, un Bob Marley, un Dalai Lama, un Che, un Martin Luther King, un John Lennon, un Chavez, hasta un Jesus o un Buda… (Pero ojo, también tenemos un Rial, un Fantino, un Tinelli, y tantos otros que pauperizan el inconsciente colectivo…). Sin embargo, sería genial que TODA la gente pueda sentirse identificada con un ideal de cambio por voluntad propia, sin la necesidad de proyectar su búsqueda de sentido de lo que está haciendo en una persona como “puente” entre la teoría y la práctica.
En este sentido, la Masa Crítica encarna ideales de cambio… de ser independiente de un sistema energético quebrado, de movernos sanamente, de conectarnos con la naturaleza, ya sea urbana o rural, de una forma única, en un momento casi meditativo que nos damos al subirnos a nuestra amada cleta… Basta con sentirnos identificados con esto para expropiarnos de ese movimiento social y hacerlo propio y sentirse así parte del cambio, desde uno mismo y por decisión propia, y no por mimetismo con un líder, sino por mero reflejo de Unidad con mis pares.
El otro de mis amigos, desde la teoría, opinaba sobre la multifunción de los miembros que asisten a cada Masa… hizo una analogía muy buena: Partido de fútbol, te puede tocar de arquero, defensor, mediocampista, delantero… en cada partido podes jugar de varias posiciones. O por ejemplo, en el vóley, que las posiciones de los jugadores van rotando… Bueno, con la Masa Crítica pasa exactamente lo mismo, uno va rodando, pedaleando, compartiendo el momento, pero a medida que se mueve dentro de la masa de bicis, va ocupando diversos lugares en los cuales su accionar pueda llegar a ser necesario.
Aquellos que van delante de la masa van decidiendo donde doblar; los que van a los costados salen a “taponear” las intersecciones saludando y agradeciendo cordialmente a los conductores de los vehículos motorizados que tan pacientemente nos esperan; los que van atrás intentan cubrir los huecos para que ninguna moto intente un tetris suicida incrustando su moto dentro de la masa; los del centro pueden incluso brindar un espacio de seguridad alrededor de aquellos padres y madres que vayan con sus hij@s, en fin… como las células de un mismo organismo, existe multifunción en cada uno de los ciclistas de la masa. Existen hasta los más serenos, que poseen el don de hablar con astucia para persuadir a aquellos conductores que desean maldecir inapropiadamente a los que estamos intentando cambiar el mundo.
Entonces, ambos amigos tenían razón, pero se deben fusionar… existen líderes, pero también puede emerger un líder en cada uno de nosotros, y eso se logra simplemente luchando por lo que nos dicte el corazón, y si cualquier movimiento social o cultural lo invita a uno a salir a la calle a expresarse, entonces debemos tener el coraje moral de asumirnos y reconocernos como formadores del cambio. Al mismo tiempo (como siempre, no podemos escapar de las dualidades), existen varias funciones dentro de la masa, roles, posiciones, que todos pueden tomar en cualquier momento, porque la Masa es una sola masa cohesionada rodando por el cambio.
Recordé otra conversación entre dos amigos:
“- (…) tu planeta está evolucionando, comienza a generar energías más sutiles, vibraciones cada vez más elevadas, radiaciones luminosas que favorecen el crecimiento del amor en todos los seres. Eso ya está produciendo grandes cambios en millones de personas. Un poco más y ya estarán preparados para dar el salto evolutivo (…). Pero por ahora no es posible.
– ¿Por qué, Ami?
– Porque están guiándose por viejos patrones mentales que no se adaptan a los nuevos tiempos. Esto hace sufrir a la gente, es como cuando usan zapatos apretados. Pero los seres han nacido para ser felices, Pedro, no para sufrir; por eso buscan instintiva o conscientemente un mundo mejor. ¿No has notado que últimamente se habla mucho de amor?
– Si, Ami, es verdad, se habla mucho, aunque no se practica demasiado…
– No, no por todos. Algunos escogen hundirse cada día más; pero por otro lado, más y más personas tratan de elevar su nivel y vivir con más solidaridad y alegría, y eso podría extenderse todavía más y… (…)
– Pero a pesar de eso, me parece que en la Tierra la gente no es más feliz que antes.
– Algunas sí; otras no tanto. Sucede que antes había más violencia, injusticia, guerras y pobreza, pero las personas eran menos sensibles, creían en las guerras, en la ley del más fuerte; eran capaces de soportar vidas muy tristes, pero sin darse cuenta; podían vivir permanentemente en peligro de muerte creyendo que eso era normal. Hoy ya no, hoy la mayoría sólo quiere ser feliz y vivir en paz. Es una “nueva hornada humana”, producto de radiaciones más finas, de la evolución planetaria.
– Creo que yo pertenezco a esa hornada…” (E. Barrios, 2013)
Tuve la oportunidad y el placer de hablar en voz alta frente a la Masa y dirigirme a cada uno de ellos directamente hace unos días atrás, para decirles dos cosas centrales. Por un lado, recordar las palabras de Pepe Mujica que pronunció hace un par de semanas atrás en Ecuador, donde hizo un llamado de atención para que le pongamos contenido a nuestra existencia… Confiar en uno mismo, y salir a pedalear encarnando esos ideales de cambio es, justamente, ponerle CONTENIDO a la EXISTENCIA, y lo hacemos cada vez que nos levantamos a defender un ideal.
Por otro lado, les pedí que, mientras pedaleaban, se miren los unos a los otros y que recuerden estas caras, y que se reconozcan a todos como parte del cambio de paradigma; somos nosotros, en el aquí y ahora, y lo estamos haciendo.
Entonces, (y a esto quería llegar con todo esto, ergo si leíste hasta acá gracias, ahora intentaré resumir): Si bien es cierto que el liderazgo es una forma de organizarnos (la jerarquización de poder a la que estamos acostumbrados), debemos comprender nuestras funciones horizontalmente.
Para esto, el liderazgo debe ser el ideal mismo… Y esto se logra “despersonificando” el movimiento social, para que quede de plano EL IDEAL DE CAMBIO por sí solo…
Sé que es una teoría sociológica quizás un poco limada… pero, por otro lado, siento que es la forma más pura de movilización social posible, y que quizás sea una forma de lograr perpetuarla en el tiempo al no caer en errores típicos del ego humano. Puede ser difícil, pero la propuesta es tentadora… hacer las cosas de forma diferente a como se venían haciendo…
A los fines de lograrlo, se me ocurrió un ejercicio eterno de aplicación, porque un gran amigo mío, un trotamundos mecánico melómano, me regaló un mágico triciclo que permite disfrutar del ecosistema urbano de una forma radicalmente diferente… Ese triciclo cambió mi vida al obligarme a no llevar nada conmigo y disfrutar del camino… Ese triciclo permite en cierta forma, por su porte, “liderar” (entre varias comillas) la masa de bicis (supongo, quizás, por tener una rueda más)
Entonces, a partir de Agosto del 2015, cuando parta a la provincia salteña de nuestro país a intentar emprender un proyecto de Ecoaldea en Rosario de la Frontera, donaré el triciclo a la Masa Crítica Pampeana a los fines de que se lo turnen entre todos los miembros que asistan. Un día la lleva uno, y a término de la Maseada, se la lleva otra. El mecánico del tric es miembro vitalicio de la Masa, y no tiene problema en arreglarlo. Así que, como diría Fito, es sólo una cuestión de actitud.
A la Masa no le quedará otra que despersonificarse y trascender…
Será hasta la semana que viene,
Brian Longstaff.-
Pd. Este Lunes 22 de diciembre, a las 20:00 hrs., parte de la esquina latinoamericana santarroseña (Uruguay, Brasil y Peru) la Masa Crítica de despedida del 2014 – están todos invitados.
Bibliografía
Enrique Barrios. “Ami, el niño de las estrellas.” Ed. Sirio. Buenos Aires, 2013.
Fotografías: Abby Viale =) (menos la primera, tomada por mí, y la de Paz para Argentina, tomada por Luz Sánchez)
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