BA 267 – Argentinos Bebiendo Agua Potable Contaminada Por Agroquímicos.
¿Y ahora qué hacemos?
¿Cómo “comunicamos” esto?
¿Cómo “informar” de manera seria y evitando caer en catastrofismos?
¿Cómo logramos que la gente reaccione y se genere una reacción en cadena que relacione ecología y despertar espiritual?
¡Fuaaah!
Por empezar, diré que esta es mi visión subjetiva, formada a partir de datos objetivos, una descripción de mi trayecto en el seguimiento de una historia que supera la ficción.
Intentaré ser mucho más breve que el informe anterior de los “resultados exiliados” porque me dijeron que era muy largo. Pero anticipo que sólo logré achicar de 30 a 15 carillas mi poder de resumen.
Dicho esto, los invito fuertemente a leer unas palabras mucho más esclarecedoras que las mías, en los diversos artículos que cubrieron lo que está pasando (al final, en la bibliografía).
Yo había decidido abrirme un poco del tema, por sanidad mental, para no reaccionar desde una emoción indomable.
Buscar algo de paz; mantener la cordura.
Recalibrar.
“Volvió a preguntarse para quien estaba escribiendo aquel diario. Para el futuro o para el pasado, para una era que bien pudiera ser imaginaria (…) ¿Cómo dirigirse al futuro si de su personalidad no habría de sobrevivir un solo vestigio material, ni tan siquiera la palabra anónima estampada sobre una hoja de papel? (…)
Sabíase un espectro solitario proclamando una verdad, una verdad condenada a esfumarse en la noche de los tiempos. Pero en tanto consiguiera proclamarla de algún modo se mantendría la continuidad. Lo importante no era precisamente hacer que esa verdad llegara a oídos de alguien; lo fundamental consistía en conservar la razón de modo a preservar y transmitir el patrimonio de la especie humana.”. (George Orwell, de manera premonitoria hace más de medio siglo atrás, en su novela “1984”)
Hasta llegué a ir a ver a un médico amigo para preguntarle cuán en riesgo estábamos nosotros viviendo por estar constantemente expuesto a la eterna deriva al habitar una zona rural de alta productividad agricultural de nuestro país. Su respuesta me tranquilizó, a la vez que hizo trisas mis esperanzas de cambio en el corto plazo.
Tranquilo… está en todos lados.
No importa si es el campo o la ciudad…
Por ejemplo, hoy vinieron siete señoras a verme, por alergias…
“Señora… ¿sabe a qué es alérgica?” – y se ríe. Claramente para no llorar.
Así que, esto es lo que he llegado a pensar:
En los tiempos que corren parece que si uno no es breve, no llega el mensaje.
El problema con esto es que lo profundo, complejo e intrincado, a veces es difícil de resumir y pareciera que estamos en una era en la que no hay tiempo para pensar las cosas coherentemente, ni mucho menos de manera lógica.
Por lo que entiendo de la censura intelectual científica llevada adelante por el Estado Nacional con el caso SPRINT, lo que comenzará a suceder es que los “papers científicos” que sean realmente importantes para el desarrollo verdaderamente sustentable de la sociedad, serán silenciados, apartados y no difundidos por medios oficiales. El ocultamiento de la verdad sucede desde tiempos inmemoriales…
Es una verdadera lástima, y una verdadera vergüenza, que todo lo que deberían ser grandes aportes científicos argentinos, son silenciados cuando ponen en jaque al sistema tal y como está.
El INTA se jacta de preocuparse por el desarrollo sustentable, pero esto es sólo un vil eufemismo. Es el Estado Nación, a través de sus cambiantes gobiernos (o, en el caso del INTA, a través de sus Consejos Directivos), el que debe garantizar la salud humana. Sin embargo, luego de años de acumulación unilateral de riquezas y poder, los grupos de magnates accionistas mundiales están detrás de cualquier política de cualquier país, orquestando todo. Sólo individuos consientes de y por sí mismos, unidos en actos cooperativos de solidaridad espontánea, podrán trascender al sistema actual de opresión social y extracción anti-natural de recursos, y crear un mundo con vínculos sanos, empezando por el vínculo con la Naturaleza, de la cual somos parte.
Mi acto-político y periodístico, es traducir resultados científicos y comunicarlos de manera entretenida de ser leídos e internalizados, para que toda la población los comprenda, pero principalmente para que quienes sí estén metidos en política u ocupen otros cargos importantes en la toma de decisiones de nuestra sociedad actúen, con coraje moral, en consecuencia.
Es por esto que me comprometo con mis pocos lectores a seguir “socializando la información”, dando difusión a contenidos científicos en un lenguaje más ameno. Contenidos que, a su vez, no están siendo mencionados en los medios masivos de desinformación.
Si bien, como diría el mismo médico amigo, el día que hablen de estas cosas en los medios masivos me preocuparía, pues están ocultando otra cosa muchísimo peor…
Así que, esta vez, para ir al grano y hacerla muy corta, voy a comenzar por el final; por las implicancias de haber leído este “paper” (en inglés) titulado: “Pesticide Pollution In Argentine Drinking Water: A Call To Ensure Safe Access” (“Contaminación por Pesticidas en el Agua Potable Argentino: Un llamado para Asegurar el Acceso Seguro”)
¿Cuáles son las implicancias de que los argentinos estemos tomando agua potable contaminada por pesticidas?
En el “abstract” (el resumen del trabajo que se presenta al inicio de cualquier “paper científico”) se señala lo siguiente:
I. Existe una significativa-notable correlación entre los pesticidas usados en los cultivos y los encontrados en el agua potable.
II. Existen sitios donde se superan los límites establecidos por la Unión Europea tanto de las concentraciones individuales de los pesticidas (midiendo uno por uno por separado), como en las concentraciones acumuladas de todos los pesticidas (midiendo todos los pesticidas juntos).
III. Para garantizar el acceso al agua segura de tomar y garantizar la protección de la salud pública se deben incluir nuevos umbrales en las regulaciones actuales, a la vez que comenzar a progresivamente reducir el uso de pesticidas en el sistema agricultural argentino.
En mi opinión, pensándolo fría y detenidamente, estas verdades llevan a las siguientes implicancias colectivas:
- Ya estamos más allá del principio precautorio, aquel que dice que ante la duda de daño al medio ambiente, se debe detener la actividad en cuestión… (Ya no hay dudas)
- Ya no es una cuestión de bibliografías antagonizadas. (Ya no hay dudas).
- Ya es nocivo, para la salud humana, continuar con este modelo productivo (Ya no hay dudas).
- Ya no es un problema rural, sino urbano también, los pesticidas ya están en todos lados (Ya no hay dudas).
- Lo que sí hay, son intereses económicos en jaque.
La introducción del trabajo, aclara que el objetivo de la investigación “es proporcionar información acerca de la presencia y niveles de concentración de pesticidas y productos de degradación en el agua de fuentes subterráneas destinadas al consumo humano para substanciar la necesidad de adoptar regulaciones nacionales concerniendo el contenido de pesticidas en el agua potable. Según nuestros conocimientos, este es el primer estudio científico que identifica los pesticidas predominantes entre los 53 pesticidas y productos de degradación testeados, y sus respectivos niveles de concentración encontrados en el agua subterránea usada para suministrar agua potable en la Argentina.” (el resaltado es mío).
En las consideraciones finales del trabajo, se señala que “la presencia de múltiples pesticidas en el agua potable llama a su inmediata inclusión en las regulaciones actuales para ser monitoreadas periódicamente. La exposición de las personas a los pesticidas resalta la vulnerabilidad de las políticas públicas nacionales, las cuales deberían garantizar el cumplimiento del derecho humano al agua segura.”
Los valores encontrados están dentro del cuerpo del trabajo presentado al final de este artículo. De todas formas, para ir estableciendo mi punto, ya no importa qué pesticidas ni en qué cantidades. ESTÁN, y tenemos que hacer algo sustancial al respecto.
(…) “Al día de hoy, Argentina tiene una lista de 18 pesticidas prohibidos, un numero comparable a Uruguay (22), Chile (27), y Paraguay (11) pero menos que Brasil (133) (PAN, 2023). Notamos que en Uruguay, similarmente a la Argentina, unos pocos ingredientes activos dominan el mercado, particularmente herbicidas, donde el 88% corresponde a tan sólo 5 ingredientes activos. El predominio en el mercado de unos pocos ingredientes activos facilita su inclusión en los esfuerzos que se están haciendo para monitorear el agua potable, pero podría dificultar la eliminación gradual de su uso. Reducir las dosis de pesticidas aplicados requiere significativas acciones de concientización ambiental y laboral, al igual que un cuidadoso control de las prácticas agronómicas.”
Dicho en criollo, esto quiere decir que sería fácil modificar la legislación (porque son unos pocos pesticidas los que deben incluirse), pero sería difícil de realizar, de llevar a la práctica la reducción de su uso, al menos en el corto plazo (porque el agro-sistema que rodea el río de La Plata está acostumbrado a unos pocos pesticidas).
El campo, al igual que un adicto a la falopa, tiene que entrar en rehabilitación. Su programa de recuperación, es “una transición agroecológica”.
Después, sí, se puede hablar horas y horas sobre cómo se tomaron las muestras. De hecho, para quienes gusten, se pueden encontrar con la sección “Materiales y Métodos”, y con el trabajo completo, como dije anteriormente, al final de este artículo. Pero, lo que me importa destacar es la arista humana/social que le veo a este trabajo. Justamente, dentro de la sección “materiales y métodos” se aclara que: “El laboratorio de análisis de pesticidas del EEA INTA Balcarce fue contactado por comunidades vecinas, municipalidades y agricultores organizados para informarse al respecto de la presencia de pesticidas en el agua destinada al consumo humano.” (El subrayado es mío).
El hecho de que individuos aislados, por separado, hayan expresado su consternación y preocupación con esta temática, es una demostración de que estamos ante un caso de contaminación “difusa”, es decir, muchos focos contaminantes en diferentes lugares y a lo largo de mucho tiempo. En este caso, mucha gente fumigando y siendo fumigada en todos lados a lo largo de mucho tiempo. Un desastre ecológico, que solo desarrolla, con el avance inexorable de la variable Tiempo, más y más plagas y pestes aún más resistentes a los químicos que les agregamos para combatirlas.
Que la aplicación de pesticidas sea una forma de contaminación “difusa”, torna todo en una problemática mucho más compleja de resolver al compararlo con un mero caso de contaminación “puntual” (como lo puede ser, a manera de ejemplo, un derrame de petróleo de una empresa puntual en un lugar puntual).
Pero aquí, con los agroquímicos llegando al agua potable, los implicados son todos inimputables.
En las conclusiones del trabajo, se esbozan los efectos e implicancias medioambientales del trabajo, diciendo que “si bien la presencia de pesticidas difiere entre las fuentes de agua para consumo humano, la contaminación difusa es una realidad que afecta tanto a las poblaciones rurales como las urbanas, acentuando la fragilidad de las políticas públicas nacionales, cuya tarea es cumplimentar con el derecho humano de acceder al agua de manera que sea suficiente, segura, aceptable y asequibles”.
Debo confesar que es la primera vez que leo una “Declaración de Intereses opuestos/contradictorios” en un trabajo científico. En ella, se lee la aclaración de que los autores declaran que no tienen intereses financieros contradictorios o relaciones personales que pudiesen influir en el trabajo que reportaron en este “paper”… Espero que esto también sea obligatorio para quienes defienden el uso de las buenas prácticas agrícolas con su propia batea bibliográfica.
Es lamentable, que de vivir más de 3 años en el ámbito rural, lo único que puedo concluir es que pareciera que repoblar el campo es directamente una misión imposible de ser cumplida a nivel país, si se desea seguir aplicando este modelo. Es difícil repoblar el campo, por el sencillo hecho de que cuando ponés a un observador (el o la habitante rural) dentro del sistema agrícola, las buenas prácticas agrícolas pasan a ser impracticables.
La zona rural -por definición y por ley- es productiva, no así la zona urbana… Con lo cual, si vivís en el campo, simplemente no hay nada que hacer.
“En el campo las cosas se hacen así”, es una respuesta muy común que me dicen la mayoría de los agrónomos con los que tuve paciencia suficiente de conversar diplomáticamente.
Como les dije antes, en lo personal, decidí abrirme un poco de todo esto… porque me estresaba mucho estar gritando verdades con la birome y el teclado sin que nadie escuche, o peor, que te tomen por radical o exagerado.
Así que decidí ir tomando nota, cuidadosamente, de todo lo que iba aconteciendo, para hacer un debido seguimiento. Tener en claro una cronología de eventos para que todo tenga un hilo conductor, dejando de ser meras noticias desperdigadas por ahí…
Lo que sigue, aconteció en 3 meses, entre el 4 de octubre del 2023 y el 3 de enero del 2024, si bien se viene desarrollando y aconteciendo hace años atrás.
Todo estalló /desde mi vivencia, claro/ el miércoles 4 de octubre… Luego de 26 horas seguidas, en desvelo, de traducción de datos del inglés al español, publiqué los “Resultados Exiliados”, exponiendo a todos la problemática agroquímica, y fue un éxito en redes sociales ajenas a mi alcance.
¡Finalmente se dijo lo que institucionalmente no se podía decir!
Al día siguiente, me escribe amablemente Marcos Filardi del Museo del Hambre, solicitando permiso para difundir la nota.
“Por supuesto que sí” – le dije.
¡& ahí perdí el control de ese Texto Mártir!
El viernes 6 de octubre, la nota fue tomada por el Diario La Vanguardia, de Balcarce (Buenos Aires), de donde es oriunda Virginia Aparicio, la investigadora del INTA silenciada desde junio del 2023.
Luego del fin de semana, a 5 días de publicado mi artículo, Ploff.net ya había registrado más de 5.000 ingresos al informe, un número nunca antes logrado en tan poco tiempo. Era el lunes 9 de octubre del 2023… & me enteré de que fue tomado también por La Izquierda Diario. Después me percaté que ambos artículos salieron el 5 de octubre, un día después de ser publicado el mío.
Así es el Tiempo… Te pega vueltas y rulos sin avisar.
A 10 días de publicado el artículo, terminó saliendo en el diario que mis viejos compraban cuando recién volvía la democracia al país: el ¡Tiempo Argentino! ¡Ese sábado 14 de octubre quedará por siempre guardado como un bello hito en mi historia personal!
Al no usar redes sociales de manera activa (en pos de preservar mis momentos creativos) me pierdo de este TrackTak de “compartidas”… De cómo discurre la información.
Ejemplo de caso: el artículo del Tiempo Argentino fue escrito por Luciana Rosende, quien –a su vez- encuentra el artículo ¡a través de 1 publicación de twitter! Publicación hecha por Cecilia Gárgano. Cecilia es una Historiadora e Investigadora del CONICET.
Wow… pensé… ¡Esto se está transformando en una bola de nieve! ¡Y no hice nada! Bueno, ¡sí!, ¡escribirlo…! pero después no me colgué de ello –como otrora vez- gritando a los 4 vientos pa´que me escuchen, ¡no! ¡Ya no! Lo escribí… y lo solté… Porque “lo que importa… es el mensaje”.
Pero eso no es todo. El lunes 16 de octubre, me escribe un escritor de Balcarce: Santiago Ortigosa Reguera. Me cuenta que leyó el artículo… y que además vio que yo escribía cuentos de ficción relacionados a cuestiones medioambientales. Me comparte, que el martes 10 de octubre había escrito un cuento corto relacionado a la triste realidad de los conductores de los “mosquitos” fumigadores, aquella gigante maquinaria agrícola encargada en aplicaciones varias afines a preservar un monocultivo.
Me cuenta… que solo se lo compartió a un amigo.
La historia es terrible… ¡Hasta hizo llorar a mi tío!
& la forma en que está contada…
Sus palabras tienen cierta musicalidad.
“El Niño de los Girasoles Tristes”, se llama el cuento…
Honrado por compartirme su arte, le ofrezco Ploff.net para publicar su cuento, abriendo así el sitio para otros autores comprometidos con causas medioambientales.
“Por supuesto que sí”, me dice.
& el viernes 20 de octubre salió su cuento en Ploff.net
Así llegamos al sábado 21 de octubre. Día en el que Virginia Aparicio me vuelve a contactar, solicitando mis servicios de rara conjugación: el escribir, el idioma, los estudios cursados, cierto trayecto recorrido. El Deber Llama, a cumplir con mi parte. Un rol social activo y claro: ayudar, asistir, facilitar la comunicación de estos asuntos. Así pude hacer un mínimo aporte en esta causa, revisando muy por encima el inglés en la redacción del paper mencionado aquí: “Pesticide Pollution In Argentine Drinking Water: A Call To Ensure Safe Access”
Hoy… hay muchísimos más argentinos que entienden la profundidad del problema girando en torno a nuestro sistema alimentario actual.
Hacia finales de octubre, encuentro un artículo del Tiempo Argentino, que decía: “No es solo algo rural: el glifosato ya llegó a los habitantes de CABA”
Muy bien, pensé, ahora sí… está hecho… Ya “se sabe”…
Pero, pasaban las semanas, y el ansiado “Pesticide Pollution In Argentine Drinking Water” aún no se publicaba oficialmente (ergo, yo aún no podía escribirles todo esto)
A principios de diciembre, primero me enteré que falleció Damián Marino, un grande en las luchas que llevan adelante los pueblos fumigados. Tras un pico de stress, este investigador del CONICET falleció con 46 años de edad, dejando atrás su legado de investigación. Sé que esto entristeció mucho a mucha gente…
Tristeza…
Desesperanza…
Enojo…
Sentimientos encontrados…
El 26 de diciembre, justo después de navidad, se da a conocer en una nota escrita por Matías Longoni, para el diario rural “Bichos de Campo”, que “antes de dejar su cargo, el ex presidente del INTA decidió excluir al organismo del cuestionado proyecto europeo SPRINT para medir residuos de agroquímicos”.
Allí se dió a conocer que el ex presidente del organismo, el tucumano Mariano Garmendia, el pasado 7 de diciembre, a 3 días de la asunción del nuevo presidente y convenientemente antes de dejar su cargo, ¡¡¡bajó a la Argentina del proyecto SPRINT!!!
La nota periodística del fallecimiento de Damián Marino salió el 11 de diciembre… jamás sabré si estos eventos están, de alguna forma, relacionados de manera indirecta, o si es una suposición mía.
Pero, acá viene lo bueno…
& ¡menos mal!
Justo unos días antes de que Mariano Garmendia, ex-presidente del INTA y personaje funcional al sistema, haga semejante bochorno, el 4 de diciembre del 2023, ¡había salido a la luz, de una vez por todas, en la revista científica internacional Science Direct, el paper de “Pesticide Pollution In Argentine Drinking Water: A Call To Ensure Safe Access”!
Evidenciando, así, que no se puede tapar la luz del sol con las manos.
Se publica la evidencia; se procede a la censura; fallece un referente.
Llega el día de año nuevo, y algo mágico/alquímico, al menos para mí y desde lo personal, aconteció…
Ya me estaba enroscando otra vez a escribir durante altas horas de la noche… Era sábado 30 de diciembre… Y yo quería que el 31 de diciembre se publique este artículo que estás leyendo, en una cruzada innecesaria e inexistente para que “La Verdad acerca del agua potable” esté disponible para el año nuevo. La vena marcada en mi frente. El ceño, fruncido.
Mi amada compañera de ruta me interpela, cuando me vio oscureciéndome, ensimismado sobre el teclado modo-Gollum:
¿En serio vas a cerrar y arrancar el año con esa energía? ¿Por qué no haces algo más bello?… ¿Por qué no te haces un set de música?
Y así lo hice.
Dejé “lo mental” por un rato, y elaboré un bello set de 3 horas de música electrónica, del género “progressive house” para condensar mis emociones. El cual se puede escuchar en el link provisto en la bibliografía, y sólo gracias a mis patrocinadores, al igual que leer este sitio-web. Está el acto político y periodístico de escribir, pero el arte es vasto, y también escribo poesía y ficción para variar y embellecer al mundo. Y si estoy bajoneado o enojado, mezclo música para canalizar por ahí.
El año arrancó y el 2 de enero del 2024 salieron dos artículos periodísticos. Lo que me gustó, es que uno salió en un diario nacional y el otro salió en un diario provincial. Pero creo que lo que más me gustó fue poder “abrirme” y ver que el “paper científico” de Virginia saliese a la luz de todos modos. Ninguno es ningún Mesías, y por suerte son varios los que estamos buscando respuestas. Esto me llenó de esperanza. Cosa que no me pasaba hace mucho.
Lo que más llamó mi atención, fue leer el cambio de palabras en los respectivos titulares, cuestiones semánticas mínimas, pero enormes:
En el “Diario AR”, se leía: “Un estudio del INTA revela que la concentración de pesticidas en el agua potable de la pampa húmeda supera los límites”. & en el “Diario Textual” de la Provincia Argentina de La Pampa, se leía: “El INTA revela que la concentración de pesticidas en el agua potable en el noreste pampeano supera los límites”.
Sé que el noreste pampeano está dentro de la “pampa húmeda”. Pero lo que me alegra de esta sutil pero profunda distinción, es ver tanto en un medio provincial como en uno nacional, el abordaje de una misma problemática medioambiental, desde su propio contexto.
El “Graphical Abstract”, es decir, el “resumen gráfico” del paper científico, presentado en la página web de Science Direct, es la siguiente imagen:
La imagen muestra un mapa general de las locaciones donde el agua fue muestreada. Y al costado, la cantidad de moléculas de pesticidas presentes en fuentes de agua pública y privada.
Además, sugiere que para solucionar esta problemática y asegurar el acceso al agua segura se debería, por un lado, incluir más pesticidas que estén hoy en día en uso dentro del Código Alimentario Argentino y, por otro lado, reducir el uso de los mismos.
Esto se ve en el último gráfico, que muestra la intensidad de uso de pesticidas, expresada en kilogramos por hectárea. Ahí se ve el aumento en el uso del 2000 al 2020, pasando de 5 a 7 kilogramos por hectárea… Y se plantea, una reducción en el uso de pesticidas del 40% para el año 2030, y luego una reducción del 55% para el año 2040, logrando así valores de 2 kilogramos por hectárea.
Lo cual, en mi opinión, es desafortunadamente inalcanzable si primero las personas implicadas no se proponen un profundo cambio de conciencia.
Cómo efectuamos esa transición requiere de un debate amplio, con muchos actores y actrices sociales implicados, acompañado de una decisión política que trascienda los partidos políticos de turno, logrando así que el cuidado del medio ambiente sea, por principio, prioritario para cualquier gobierno.
Ahora bien, después de todos estos hallazgos, a mucha gente le interesa saber dónde se tomaron las muestras, cuál fue el lugar exacto donde se tomó tal muestra de agua en tal o cual departamento o provincia… Cómo se hizo, quién lo hizo, a pedido de quién y con qué intereses económicos ocultos.
Pero, aquí lo único cierto es que no hay interés económico alguno cuando individuos aislados, de manera no organizada ni premeditada, se mueven motivados por sentido común propio a investigar qué puede estar pasando con su propia salud, empezando por el “agua potable” que están bebiendo.
Honesta y humildemente, creo que no debe importar en qué municipio ni sitio exacto se realizaron las muestras, ya que es una realidad que afecta a toda la región, lamentablemente.
Si se quisiera abordar esta problemática de manera periodística seria y no amarillista, se debería pedir a los municipios, a quienes gestionan las redes de agua, e incluso a quienes la venden envasada, que realicen muestreos de presencia de agroquímicos más extensos en cuanto a la diversidad de compuestos que se producen hoy en día dentro de esta industria.
Si bien en algunos lugares ya hacen monitoreos de presencia de agroquímicos, por lo general, los laboratorios convencionales analizan pocas moléculas de pesticidas presentes. Esto suele arrojar como resultado la “no presencia de agroquímicos” pero en realidad es la no presencia de “ciertos de ellos” dado que, en el ambiente (aire, agua, tierra…) circulan muchísimos de los que efectivamente medimos.
El proyecto SPRINT, tiene la ventaja de analizar la presencia de muchísimos agroquímicos más, haciendo que el estudio sea más cercano a la realidad. Quizás por esto el consejo directivo del INTA buscó silenciar la participación argentina, removiendo a nuestro país del proyecto.
Por otro lado, me gustaría destacar que estamos frente a una problemática muy compleja a la hora de determinar responsabilidades, ya que los agroquímicos se mueven muy lentamente por el perfil del suelo, haciendo literalmente imposible culpar a alguien por una mala aplicación y/o contaminación del agua. Es una realidad preocupante que lleva años conformándose. Hoy tenemos las herramientas para medir e identificar la problemática.
Insisto. Lo importante ya está dicho en la publicación científica de Virginia Aparicio, quien fuera acallada por la misma institución (INTA) que debería velar por la sustentabilidad de nuestro sistema alimentario. Esto es: modificar los umbrales permitidos de concentración de pesticidas (y mezclas de pesticidas) en las legislaciones vigentes de potabilización de aguas (las cuales ya son obsoletas).
El artículo de los “Resultados Exiliados” es largo, pero contiene las exposiciones de 10 científicos de la comunidad internacional que presentaron los datos relevados en Argentina y en Europa, en inglés. La primera vez que se publicaron los datos de Argentina fue en el exterior, dado que no pudieron hacerlo en nuestro país ya que desde la propia dirección de INTA se canceló la presentación a pocos días de realizarse. Allí hay sobradas aristas para abordar este tema.
Por “principio precautorio” (definido en la ley general del ambiente 25.675) ya se debería haber cambiado la forma en que producimos alimentos hace años. Ahora, con estos datos arrojados por Virginia Aparicio y sus colegas, la evidencia es clara, y ya no hay dudas (motivo por el cual la institución decidió censurarla).
Como ingeniero en recursos naturales y medio ambiente, pero sobre todo, como habitante de esta provincia, deseo que como sociedad pueda desarrollarse un debate serio y amable sobre una cuestión real que nos afecta a todos a diferentes niveles. Y eso exige mucha claridad y responsabilidad al momento de comunicar.
Tan sólo imaginen, si esto me costó escribirlo como ser humano, lo difícil que debe ser toda esta problemática para una pobre abeja.
Desde la llanura los despide, vuestro fiel servidor y comunicador ambiental,
Brian Longstaff Howard.-
Bibliografía Relacionada, en orden cronológico:
(Hoy más que nunca, recomiendo leer estos artículos)
– Marzo de 1951, 3era edición en argentina de la novela: “Mil Novecientos Ochenta Y Cuatro” / conocida coloquialmente como “1984”/ escrita por George Orwell. Editorial Guillermo Kraft Limitada, fundada en 1864 en la provincia de Buenos Aires.
– 16 de enero, 2022: “SPRINT es una iniciativa internacional que evalúa el impacto de los agroquímicos en la vida cotidiana: Porque hasta la “mila” de soja podría tener restos de glifosato”, por Lola Lopez. Bichos de Campo.
– 7 de Julio 2023: “Agroquímicos: ¿Cómo fue el proceso que terminó con lo que para unos es censura en el INTA y para otros simplemente moderación institucional?”, por Matías Longoni. Bichos de Campo.
– 4 de octubre, 2023, BA 264 – Resultados Objetivos Exiliados: “Estamos todos expuestos”, por Brian Longstaff Howard, para Ploff.net
https://ploff.net/es/ba-264-resultados-exiliados/
– 5 de octubre, 2023: “Crítico documento sobre el impacto de los agroquímicos: ‘estamos todos expuestos’”. La Vanguardia.
Cito: “Longstaff ha denominado a estos resultados como “Resultados Exiliados” debido a que en Argentina no se permitió su presentación. “Los investigadores científicos fueron prohibidos y censurados, y finalmente se presentaron en el extranjero, tanto de manera virtual como presencial, en varios lugares del mundo al mismo tiempo”.
Ante esta situación, Longstaff considera que permanecer indiferente y no tomar una posición es difícil. Los datos presentados demuestran que no se puede seguir ignorando este problema y que todos estamos expuestos a él.”
– 5 de octubre, 2023: “Agrocensura. INTA: cuestionado por censurar los resultados del estudio internacional SPRINT sobre agrotóxicos”. La Izquierda Diario.
Cito: “El ingeniero Brian Longstaff Howard tradujo para el portal Ploff.net los puntos principales de esta charla.”
– 14 de octubre, 2023: “Tienen agrotóxicos en el cuerpo y reclaman que el INTA no abandone la investigación que lo prueba”, por Luciana Rosende. Tiempo Argentino.
– 20 de octubre, 2023: sale a la luz el cuento de Santiago Ortigosa Reguera: “El Niño de los Girasoles Tristes” (escrito el 10/10/2023), publicado en Ploff.net.
https://ploff.net/es/ba-266-el-nino-de-los-girasoles-tristes-por-santiago-ortigosa-reguera/
– 29 de octubre, 2023: “No es solo algo rural: el glifosato ya llegó a los habitantes de CABA. Un informe de Proyecto PIS alerta por la presencia de agrotóxicos en la orina de personas que viven en la Ciudad y que no tienen conexión con el campo. Buscan el origen: ¿Por las verduras? ¿Por el agua? Relevaron cinco distritos: de ellos, el que más alto porcentaje de herbicida dio fue la Capital Federal.” Diario Tiempo Argentino.
– 4 de diciembre, 2023: Paper Original, Revista Science Direct: “Pesticide Pollution In Argentine Drinking Water: A Call To Ensure Safe Access” (“Contaminación por Pesticidas en el Agua Potable Argentino: Un llamado para Asegurar el Acceso Seguro”)
Link 1: https://doi.org/10.1016/j.envc.2023.100808 & Link 2: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S2667010023001312?via%3Dihub
– 11 de diciembre, 2023: “El adiós a Damián Marino, científico referente de la lucha contra los agrotóxicos. Agobiado por el contexto y tras un “pico de estrés”, falleció a los 46 años el investigador del Conicet que dedicó su vida académica y militante a acompañar e impulsar el reclamo de los pueblos fumigados. Su mensaje días antes de la asunción de Milei.” Diario Tiempo Argentino.
https://www.tiempoar.com.ar/informacion-general/damian-marino-cientifico-agrotoxicos/
– 26 de diciembre, 2023: “Antes de dejar su cargo, el ex presidente del INTA decidió excluir al organismo del cuestionado proyecto europeo SPRINT para medir residuos de agroquímicos”, por Matias Longoni. Bichos de Campo.
– 31 de diciembre, 2023: “This is My Progressive Journey Set” / “Este es mi viaje progresivo” – Compilación de música electrónica mezclada por mí.
https://soundcloud.com/brianlongstaffhoward/this-is-my-progressive-journey-set-31122023
– 2 de enero, 2024: “Un estudio del INTA revela que la concentración de pesticidas en el agua potable de la pampa húmeda supera los límites”. El Diario AR.
– 2 de enero, 2024: “El INTA revela que la concentración de pesticidas en el agua potable en el noreste pampeano supera los límites”. Diario Textual (de la Provincia de La Pampa)
Agradecimientos:
A Damián Marino, por su legado, y su Nombre.
A Virginia Aparicio, por su trayectoria pasada, la que le está tocando labrar ahora, y futura; por su coraje moral y por ser fuente de inspiración.
& mi especial gratitud para con mis patrocinadores:
Marcos Edwards, Andres Hillion, Santiago Eduardo Smith, Mariana Pagella, John Kleuser, Laura Pagani, Agustín Estala, María Jose Howard, María Eugenia Varela, Eduardo Wydler, León Zaldivar Jarabo & Gustavo Nervegna.
Gracias a ellas y a ellos puedo dedicarle un tiempo a seguir estas noticias, investigarlas y luego escribir sobre ellas.
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